viernes, 30 de septiembre de 2011

HISTORIAS EN EL AIRE: UNA RED DE HISTORIAS

Un programa semanal y un micro-programa diario dedicados a las historias, se difunden a través de Narrativa Radial, por una extensa lista de emisoras en todo el país.

UN SUEÑO.
Cuando empezamos con esta iniciativa, la idea que nos impulsaba era el sueño de que la radio, colmada hasta el hartazgo de las mismas noticias y de la misma música, se llenara de nuevas voces, de historias, esas que abren los sentidos, que mueven y conmueven, ya sea a la risa, a la reflexión, y la extraordinaria experiencia de imaginar. Y que la radio, con su inmenso poder de acompañar la cotidianeidad de las personas haga audible este sueño. Sabíamos que compartíamos esta idea con muchos y que estos muchos podían tener como referencia este espacio: un espacio de radio que congregara historias que anden dando vueltas por el aire.

UNA REALIDAD.
Es así como, amparados por esa gran convicción, nació un programa de radio que se propuso reunir relatos breves de diversos autores, locutores, editores, productores de radio (dicho en otras palabras, magos: personas que saben combinar las voces y los sonidos para poner en escena el teatro de la mente). Entre estos artistas de la radio se encuentra el propio equipo de Narrativa Radial como así también otros equipos de trabajo: América profunda, Historias sonoras, Radialistas, la biblioteca parlante Mirá lo que te digo, Majo Bustamante, entre otros profesionales (e incluso estudiantes) que apuestan al potencial narrativo de la radio para contar historias.

Desde Narrativa Radial entonces, se logró “atrapar” historias radiales para llevarlas al aire. Historias en el aire es, por un lado, un programa que ofrece una hora de ficciones breves, textos sonorizados, breves relatos documentales, ensayos sonoros, etc. Y también un micro-programa diario de 3 a 5 minutos, en el que cada día se estrena una historia.

EN RED.
Ese programa y micro-programa conforma hoy, luego de tres años, una gran red de emisoras.

Desde sus comienzos en la AM 530 La Voz de las Madres hasta hoy, con 13 repetidoras a lo largo y ancho del país, Historias en el aire cumplió parte de su cometido. En octubre se suma a la difusión del programa, la radio LT 11 de Concepción del Uruguay (Entre Ríos) a la ya larga lista: Radio Ahijuna (Quilmes, prov. de Bs. As), Radio Universidad (Rosario), FM La Propaladora (Neuquén), Radio Universidad-Calf (Neuquén), FM Natura (Salta), FM Milenio (Capilla del Monte, Córdoba), Radio Eterogenia (Córdoba), Radio Sur (Buenos Aires), FM Raíces (La Plata), Radio á (La Plata), Radio ETER (por internet), Radio ISER (por internet), FM del Tuyú (San Clemente, Bs.As.) Estas emisoras de orígenes, lugares y perfiles heterogéneos han apostado a través de espacios en su programación a la difusión de historias por radio, o en otras palabras, a la radio como vehículo y centro del arte y la cultura.

LO BUENO Y BREVE.
Lejos en el tiempo quedaron las radionovelas que reunían a la familia y a los amigos diariamente en torno del receptor a válvula. La radio se había colocado en otros ámbitos, se pegó a la oreja del transeúnte, acompaña al automovilista en su recorrido por la ciudad o las rutas, se transforma en la banda de sonido de tantos quehaceres cotidianos. Por eso, los programas y micro-programas de “Historias en el aire”, ofrecen relatos breves que permiten al oyente ir y venir con la radio a cuestas sin necesidad de estar atado al receptor durante largo tiempo.

LA APUESTA.
“Historias en el aire” cumplió gran parte de su sueño: el espacio para los relatos existe. Los artistas radiales que ceden sus relatos lo hacen desinteresadamente para embellecer el aire de la radio. En lo inmediato la idea es seguir sumando emisoras a la red de “Historias en el aire”. Para un plazo más largo, aspiramos a que los grandes profesionales de la radio que existen (y los otros que se preparan) sean valorados por su arte: el de contar historias, varias, diversas, grandes, pequeñas, creativas, atrapantes. Y no por repetir como loros las “noticias del día” y la música de la temporada, como si esa fuera la historia (la única) que le toca en gracia a la radio.